2023-08-31-21-00-22
Una fotografía estenopédica sobre una naturaleza posthumana captura la belleza de la vida que se ha ido. Esta imagen, tomada con una cámara estenopédica, captura la soledad de un lugar desolado. El fondo está lleno de árboles marchitos y un cielo gris que se extiende hasta el horizonte. El foco de la imagen es una tumba solitaria, con una cruz de madera colocada en la parte superior. La cruz está cubierta de musgo, lo que sugiere que ha pasado mucho tiempo desde que alguien visitó este lugar. El musgo y la hierba alta rodean la tumba, lo que sugiere que el tiempo se ha detenido. La luz del sol se filtra a través de las ramas de los árboles, dando a la imagen una sensación de calma y tranquilidad. Esta imagen muestra la belleza de la vida que se ha ido, recordándonos que la vida es frágil y preciosa.